¿Han experimentado la sensación de sentirse nostálgico en esta época? Que sin importa cuán rodeados de personas, fiestas o celebraciones, siempre sentimos un vacío. Un espacio de tristeza, angustia, temor que inexplicablemente se apodera de nosotros.
A mi me ha pasado en años anteriores. Sentir aquella angustia y aquella nostalgia, viviendo preocupaciones anticipadas. A veces llevando preocupaciones y angustias que se resolverán eventualmente. Sintiendo aquel vacío aún teniéndolo todo, familia completa, tradiciones, comida deliciosa, todo lo que cualquier persona pudiera pedir y sin embargo no era feliz. Sentía que todo lo que me había propuesto estaba inconcluso, que todos los planes habían fracasado y ese sentimiento de frustración era enorme.
La semana pasada leí un artículo acerca de esta tristeza, del por que viene y que podemos hacer para superarla.
El artículo se centraba en las vivencias de una santa cuando era pequeña. Siendo eminentemente sensible, cualquier palabra fuera de lugar, cualquier situación tensa, la ponía triste. En una ocasión particular, su padre dijo que nunca más celebrarían la navidad. Ésto la sumergió en un estado terrible de soledad y desesperanza. No había pasado nada grave, pero ella se sentía sola y abandonada.
Sin embargo, al andar por la calle, se encontró con unos niños que probablemente nunca habían tenido una navidad. Tenían hambre y frío, y se veían obligados a pasar a la intemperie esas épocas; en soledad. Al ver esto, recordó todo lo feliz que ella había sido y que podía compartir con esas personas la felicidad que ella había sentido por tanto tiempo. Al disponerse a ayudar a estas personas, su tristeza desapareció. Toda aquella angustia, soledad y miedo dejó su corazón. Al darse a los demás vio realizados muchos sueños y su corazón se llenó de amor.
A medida leía este artículo, descubrí que es cierto, el amor desmedido y la ayuda a los otros llenan nuestro corazón y echan afuera toda tristeza. El perfecto amor echa fuera el temor. Es con amor, sirviendo, que nuestro corazón deja de fuera la nostalgia.
No tenemos que hacer grandes obras para esto. No tenemos que dar grandes regalos y gastar millones para esto. El secreto es sencillo, es agradar a otro con amor. Es regalar una sonrisa, una alegría, un poco de tiempo, esto es lo que el mundo mas necesita. Yo les aseguro que si donamos nuestro tiempo para hacer feliz a quien lo necesite, no habrá tristeza que ingrese a nuestro corazón.
Desde hace un tiempo comencé a aplicar esta teoría. La navidad no es tiempo de regalos, empaques y cosas caras, la navidad es tiempo de amor. La navidad es tiempo de dar lo más preciado, aquello que jamás podremos recuperar y nos devolverá con creces en amor. La tristeza nunca entrará a nuestro corazón si está lleno de amor desinteresado.
Lectores amigos, los insto para que llenemos esta época de alegría y de amor. Que a toda persona que se sienta sola y triste, podamos abrazarla y darles una sonrisa. Compartamos nuestra alegría con todo aquel que lo necesite. Demos amor desmedido. Si usted está triste, dese a los demás y todo desaparecerá.
Les deseo una muy feliz navidad, que nazca en su corazón ese amor y alegría desmedida que todos merecemos.
¡Feliz Viernes! 😊
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