En muchos lugares del mundo hoy se celebra el día del padre. He leído muchos comentarios diciendo que este es un día meramente comercial. Honestamente, cada vez que escucho decir eso de un día en específico me desagrada mucho. Yo creo que todos los días debemos de amar a nuestros padres, que todos los días ellos son especial, pero darles un día específico para que toda la atención y todo nuestro amor gire alrededor de ellos, no tiene precio.
Nuestros papas siempre son pasados a segundo plano. Siempre son las mamás las que se encargan de cuidarnos, cambiarnos, alimentarnos, peinarnos. Siempre son las mamás las que acaparan toda la atención. La imagen común es que un papa es alguien con un maletín y corbata que vemos por las tardes. Son nuestras mamás nuestras confidentes y a quien se supone que recurrimos para todo. La percepción común es que el papa es una figura inalcanzable, distante. No sé si son los tiempos o nosotros, los que hemos ido cambiando esa figura. Alguien más accesible o alguien más cercano.
Para mí la verdad, nunca habido una distinción. Nunca ha existido una diferencia marcada. Mi papá fue y es mi primer amor. Se levantaba por las noches para asegurarse que todo estuviera bien. Me llevo al kinder siempre, incluso se levantaba por las mañanas para ponerme miles de cientos de “piojitos” en mis tan alborotados colochos. Ha sido mi confidente, mi compañero de parrandas, el ser más alegre que exista, el mayor promotor de mis Viernes de Nicole. Mi papá es nuestra alegría. Mi papá es quien jamás se rehusa, cuando le digo “dame un traguito de tu cerveza”. No puedo decir que solo conmigo, por ser niña es especial, no, porque con mis hermanos es igual. Se preocupa de cada detalle de ellos, sin importar la edad que tengan.
Mi papá no necesita una capa para tener súper poderes, su súper poder es ser papa. Es saber escuchar cada locura en casa y dar la respuesta sensata a cada loco. Es que te impulse para hacer algo aunque no lo quieras hacer. Es obligarte a ser mejor todos los días. Mi papá ha trazado muchos pasos para mi, confieso que sin su ayuda no podría ser quien soy ni estar donde estoy. Mi papá es mi héroe.
Por todo esto y mucho más, hoy no es un día comercial.
¡Felicidades a todos los padres del mundo y en especial al mío!
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